Versión estenográfica del mensaje del senador Ricardo Monreal, coordinador del Grupo Parlamentario de Morena en el Senado de la República, en la Convención Nacional Ganadera Tampico 2022
Quiero primero, agradecerles la invitación a esta reunión, porque era importante tener esta vinculación con ustedes.
Gracias, Gabriel.
Siempre estuve vinculado con la Confederación Nacional Ganadera, con las uniones ganaderas en los estados, y con las asociaciones ganaderas en los municipios.
Para mí es un sector muy importante que ha generado no sólo empleo, sino estabilidad al país.
Ya Raúl, el senador Raúl Bolaños, presidente de la Comisión de Medio Ambiente, ha explicado técnicamente lo que representa para el Senado de la República el sector ganadero.
También le pedí que me acompañara al senador Elí, él es senador por San Luis Potosí, una región también ganadera.
Y yo quiero agradecerle a Osvaldo la invitación, porque me permite comunicarme con ustedes. Sé que han sido dos días, desde la cena de inauguración; ayer trabajaron y hoy concluyen con una elección.
Pero, quiero expresarles lo que les dijo Raúl, como presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, los invitamos. Una vez que concluya su mesa directiva, creo que continúa el acto siguiente; vamos a esperar, vamos a esperar a Homero y a sus comités para platicar en el Senado, para ponernos de acuerdo.
Y yo quiero esta mañana, darle un reconocimiento a Osvaldo. Un aplauso a Osvaldo porque ha sido muy buen dirigente; además ya tiene 18 años en la Confederación.
Si mal no recuerdo, yo fui gobernador en 1998, y si mal no recuerdo era Gustavo Torres, que era de Tamaulipas, por cierto; y Gustavo Torres fue electo presidente de la Ganadera y fue en Zacatecas, y yo estaba iniciando.
Por cierto, cuando yo fui candidato a gobernador, que eso se lo reclamé siempre al dirigente estatal, no me permitieron reunirme con los ganaderos. Porque así era, ¿no?, no me extraña; los gobernadores cerraban la puerta, yo venía de la oposición y nunca pude reunirme con los ganaderos.
Aunque me reunía en lo corto, pero como Unión Ganadera Regional de Zacatecas, me cerraron las puertas.
Luego, en el qué sería, en 2004 entró Cházaro, pero ya estaba antes en el Comité, entonces teníamos mucha comunicación y, cuando llegué de gobernador, a pesar de que me cerraron las puertas de los ganaderos, los dirigentes, no los ganaderos; hicimos un trabajo muy intenso con los ganaderos.
Empezamos a hacer tianguis ganaderos, en donde subsidiábamos la mejora de la calidad del ganado; pero llegamos a darles no sólo trailas, molinos, sino maquinaria pesada. Las asociaciones ganaderas en los municipios tenían sus propias maquinarias, un D-6, un D-8, una máquina para hacer bordos, para arreglar caminos, sacacosechas; y cada asociación era propietaria de su maquinaria.
Y, empezamos a mejorar mucho la ganadería, porque somos un estado ganadero, nosotros somos de esa familia. Entonces, desde entonces me une una buena amistad con Osvaldo, me une una relación de respeto.
Y, por eso también nuestro origen es ese, lo saben quienes son mis paisanos. Creo que Rayas también debe tener la misma cantidad que tú, ¿no?, de años; ¡Ah!, aquí anda Cuauhtémoc, no, pues tiene la misma, ya tiene muchos años también ahí, y no dudo que vayas a estar en el próximo comité directivo.
También Salvador, amigos, Salvador Álvarez y todos; pero yo tengo una gran simpatía por los ganaderos. Son gente buena, arriesgan todo en las peores condiciones, y a veces se pierde todo, pero nunca se rajan, siempre están firmes y la familia ganadera es una familia muy unida.
Por eso me da mucho gusto estar con ustedes, porque México necesita de sus ganaderos.
Ya aquí Raúl les habló sobre la ganadería sustentable.
Recuerdo a una persona de Laredo, Benavides, que ya falleció, algunos de aquí deben de recordarlo a Trini Benavides, que falleció hace poco. Allá con nosotros en Zacatecas había un viejo que yo quería mucho, muy firme como Trini, pero que luchaban, allá era don Isidro Falcón, algunos de ustedes lo recordarán.
Pero Trini se adelantó a su época porque hablaba de lo que ahora el senador habla, de la ganadería sustentable. Y yo les diría que nos metamos a eso, porque además hay posibilidades de ser productivos, cuidar la tierra, cuidar el medio ambiente y cuidar la atmósfera; es decir, podemos implementar mecanismos de ganadería sustentable y también mejorar nuestros ingresos.
En el Senado los vamos a recibir con mucho gusto.
Hace unos meses presenté un libro, por cierto, voy a estar en la Ganadera, le había dicho a Osvaldo y ahora a Homero, al Consejo, vamos a presentar un libro que se llama “Otro campo sí es posible”, que escribí.
Se publicó por Porrúa hace ocho o diez meses, el año pasado “Otro campo es posible”. Y ahí trato el tema de la seguridad jurídica, de la producción de alimentos, de la ganadería sustentable, de la historia del campo, de la comunidad, del ejido, de la propiedad privada, de los Coeficientes de Agostadero.
Hablo de todos los problemas que tenemos en el campo y planteo soluciones al campo.
Este libro lo voy a presentar pronto con ustedes, en mayo, a finales de mayo, es este libro. Ya está a la venta, es una editorial, la editorial Porrúa y se llama “Otro campo es posible”.
Lo escribí porque mi vocación es del sector agropecuario. Nosotros tenemos nuestras familias, nuestro origen es campesino y amamos mucho la tierra.
Los que vivimos en el campo o nacimos y crecimos en él nunca podemos separarnos de nuestro origen ni negar nuestro origen.
Si lo pueden adquirir, cómprenlo, porque este no se regala, por la editorial no por mí, pero léanlo. Estoy tratando de buscar una edición que pueda descargarse gratuitamente, tengo que hablar con la editorial.
Pero déjenme decirles, México está en un proceso de transición política; México inició una transición política en el 18.
Desde mi punto de vista, siendo de Morena y siendo parte del movimiento que construyó este proceso electoral en el 2018, no dejo de reconocer que hay una asignatura pendiente en nuestro proyecto: el campo.
Para mí, el campo requiere de más respaldo, de más apoyo, de más atención.
Son dos sectores, dos sectores, dos problemas que para mí no hemos dado respuesta como movimiento social:
Uno. La inseguridad, que ustedes lo padecen todos los días: extorsiones, secuestros, robos, abigeos, impunidad, y el respaldo al campo. Esas son dos cosas a las que tenemos que meternos para reordenar, revisar y corregir políticas públicas, en beneficio de la gente.
Después del Covid-19, el sector agropecuario fue el único sector que resistió la embestida del Covid. Y el sector agropecuario y agroalimentario fue el único que creció tres por ciento, por encima de cualquier otro sector que tronó o disminuyó notablemente su crecimiento.
El campo, de nueva cuenta, fue el sector que enfrentó la pandemia y no sólo la venció, sino fue el único sector que creció, el del sector agroalimentario, agropecuario.
Por eso sí tenemos que apostarle al campo, sí tenemos que implementar políticas públicas en beneficio del campo. Pero no retórica, no demagogia porque todos los candidatos, cuando son candidatos hablan sobre de ello, pero finalmente no aterrizan y no generan condiciones propicias para los pobladores del sector agropecuario.
En el libro lo describo. No estoy inventando ni estoy aprovechando un foro, sino en el propio libro es crítico sobre las políticas públicas, pero no sólo describo el problema sino hago propuestas para poder atender y resolver la situación del campo.
Por eso, hace unos meses, al conversar con Gabriel, en una reunión familiar-social, platicamos de estos temas y me dijo él: “por qué no nos das una plática sobre estos temas en el Consejo”, y fue donde Homero me comentó que iba a ser, junto con Oswaldo, aquí la Reunión Nacional y que me invitaban a platicar, y yo invité al senador Bolaños Cacho a que hiciera la presentación técnica sobre este asunto tan importante. Ojalá y les pueda, Raúl, compartir por la vía electrónica su presentación, porque a mí me pareció interesante.
Ojalá y ustedes se pongan de acuerdo, y ahora en los próximos días, Homero, reciba al Consejo Directivo para poder platicar sobre las reformas que están pendientes.
Quiero agradecerles la invitación.
Quiero pedirles, a los ganaderos, no tengan miedo; no hay que tener miedo a nada.
El presidente Roosevelt, en 1930, cuando fue electo, le dejaron destrozado el país, en Estados Unidos, porque los bancos, en sus abusos cotidianos, y en sus abusos tradicionales, estaban quedándose con las granjas, los ranchos de todos los ciudadanos norteamericanos por hipotecas.
Y el presidente Roosevelt entró al Gobierno y paró, cerró los bancos siete días, hasta que se puso de acuerdo con los bancos para que no siguieran suprimiendo y privando de su propiedad a los granjeros, o a los colonos norteamericanos.
Y dijo una frase frente a la situación tan caótica que en ese país existía, la etapa de la recesión, la más terrible que ha padecido ese país; dijo una frase cuando la gente se angustiaba sobre el futuro de la patria, de esa patria, de ese país, y dijo el presidente Roosevelt, “no tengan temor, no tengan miedo. No hay que tenerle miedo a nada, a lo único que debemos tenerle miedo es al miedo mismo, todo lo demás se va a resolver”.
Y yo les digo a ustedes que la ganadería, que ahora está en buen momento. Yo fui el domingo al rancho, que está cerca del rancho de Cuauhtémoc; él es de Sain Alto y yo soy de Fresnillo; tenemos un rancho con ganado, él también pero está mejor el mío. No, hay de todo, hay buenos y hay…
Entonces, le decía a un hermano, que es el que se encarga ahí, que cómo estaba el precio, y reaccionó en los últimos dos meses positivamente. Entonces, el ganado está bien y por eso yo quisiera expresarles a todos que viví toda mi vida familiarizado con el ganado.
Nosotros hemos tenido de todo; primero suizo, luego mi papá lo mezcló con cebú y luego tuvimos brahman, del propio cebú, ollir o nelore o incluso cuando llegaron aquellas sensaciones y novedades europeas, también tuvimos angus, simmental, suizos, charolais o holstein para la leche o limousin para la carne. O ahora lo que llamamos sintéticas, que es la mezcla por cuartos o por octavos, según la sangre de cada raza, el brangus.
Creo que tú tienes beefmaster, ¿no?, tú, Gabriel, el beefmaster, o el charbray; toda estas las conocí, el holandés cebú, toda la raza. Ahora ha mejorado, todo lo conocí porque comprábamos lotes de toros sementales para mejorar en los tianguis ganaderos que les digo; entonces revisábamos bien.
Por cierto de Tamaulipas, de Nuevo León jalábamos mucho ganado, Veracruz incluso, Veracruz, que tenía buen ganado, que son de los primeros productores de ganado desde entonces.
Yo quisiera agradecerles, desearles que sea muy exitosa, que se hayan divertido; porque estas reuniones son de trabajo, sí, pero también de camaradería, de placer. Muchos de ustedes traen a sus esposas, entonces la vida así debe de ser y en nuestro gremio, en el rancho, en la ganadería hay franqueza, hay amistad. Me consta.
Si hay amistad en un sector, es en este. Amistad, franqueza, sinceridad y algo que se ha perdido en la política: la palabra. Entre los ganaderos hay palabra, no importa que no hayas escrito ni hayas firmado, con que hayas dado tu palabra es suficiente para cumplir el trato hecho, y eso ya no hay en cualquier parte.
Así es que siempre hay que cuidar la palabra. Es más importante en la vida tener palabra, que tener dinero.
A todos muchas gracias. Que les vaya bien, que voten todos por, como ustedes quieran, pero muchas gracias, Osvaldo.
Muchas gracias, felicidades. El deber cumplido hasta ahora, y ahora Homero.
Enhorabuena todo el Consejo Directivo, y a sus órdenes, ahí los espero en el Senado de la República para empezar a trabajar y a conversar cómo mejoramos nuestro renglón, nuestro sector, nuestra ganadería en México.
Enhorabuena.
¡Felicidades!
Buenas tardes.