Versión estenográfica de la intervención del senador Ricardo Monreal Ávila, coordinador del grupo parlamentario de Morena en el Senado de la República, en Sesión Ordinaria, durante la impugnación al Orden del Día, donde varias senadoras y senadores solicitan el retiro de los dictámenes vinculados con la reforma electoral

Muchas gracias, presidente.

Ciudadanas senadoras y senadores:

La participación de la senadora Beatriz Paredes es muy inteligente. En su exposición, refiere vicios en el procedimiento que se suscitó o que se suscitaron en la Cámara de origen. Incluso, podría comentarles que coincido con ellos.

En el Grupo Parlamentario que coordino, se ha comentado con toda consciencia lo que sucedió en la Cámara de Diputados. De hecho, el no haber aceptado una vía rápida de aprobación, nos tiene aquí y por esa circunstancia se visibilizó una serie de errores constitucionales que nosotros hemos agrupado por bloques.

Su argumentación es atendible, pero el momento procesal y la instancia no es procedente. Lo saben muy bien y lo hago con toda la seriedad; como estrategia me parece muy inteligente, porque argumenta probables verdades de vicios del procedimiento.

En lo que no coincido es que esta Cámara asuma una posición de censora o de revisora de los actos de la colegisladora: eso no nos corresponde. Incluso, de las dos disposiciones leídas de la Ley Orgánica, se puede desprender que cada Cámara tiene responsabilidad, autonomía y tiene claridad en sus procedimientos.

Nosotros, senadores y senadoras, no podemos ni siquiera por la vía de la información, solicitarle a la colegisladora qué hizo de su procedimiento, por una razón: porque la Cámara de origen nos envía una minuta y en la minuta está contenido el procedimiento. La Cámara de Senadores presume que fue un procedimiento jurídicamente impecable o correcto; pero nosotros no tenemos facultades para decir si fue desaseado, incorrecto o violó el procedimiento de su propia Cámara.

No hay ninguna disposición, ni en la Constitución ni en la Ley Orgánica, ni en el Reglamento, para acudir a esa figura nueva que plantea la senadora Paredes.

Nosotros somos autoridad y como autoridad, sólo podemos hacer lo que la ley nos permite: se llama principio de legalidad, y no hay una disposición ni en la Constitución ni en la ley, que nos permita hacer lo que plantea la propuesta de la senadora.

No quiero dar consejos, pero la única vía a través de la cual se invaliden los actos del Poder Legislativo en materia legislativa es por la vía jurisdiccional, acudiendo a la vía de la inconstitucionalidad, que estoy seguro va finalmente a estar en ese lugar los actos que ahora estemos desarrollando en el Congreso y particularmente en la Cámara.

Cuando en 1823 se decidió crear el Senado, Servando Teresa de Mier, Lorenzo de Zavala, Manuel Crescencio Rejón, Ramos Arispe y otros sostenían que era importante dar paso y crear la Cámara de Senadores, porque podría la Cámara de Senadores, en su facultad revisora, contener los excesos de la Cámara de origen, y podría construir un equilibrio en el ejercicio de los poderes.

Pero decían en el voto particular, sin invadir facultades y funciones de la colegisladora, sino que en la vía de la revisión corregir despropósitos, excesos o puntos oscuro que trascendieran y ocultaran o contradijeran principios constitucionales.

Por eso no es posible, es más, coincido con el senador Ramírez Marín, una propuesta de tal magnitud no se resuelve por la mayoría; no se resuelve, no puedes votarlo: ¿quiénes están a favor de la propuesta y quiénes no?, porque ni siquiera estamos en un momento procesal oportuno.

Si fuera una moción suspensiva, diría “sí”, o si fuera una propuesta formal, “sí”; pero es un alegato inicial que ha esgrimido con habilidad e inteligencia la senadora Beatriz Paredes, a la que se le han sumado otros senadores de otros grupos parlamentarios.

Le puedo decir, senadora Beatriz Paredes, con todo respeto, que sus argumentos son impecables.

Que los vicios del procedimiento en Cámara de Diputados pueden ser demostrables, pueden o no ser demostrables, pero nosotros no somos una instancia ni revisora, ni censora de los actos de la colegisladora, sólo hay una autoridad que se llama Suprema Corte de Justicia de la Nación, y que revisa nuestros actos como un control constitucional.

Por eso, no entremos a ese tipo de debates que finalmente lo único que están es retardando el propósito fundamental.

Creo que es muy rico lo que ahora pasará y la gente en el país está esperando el debate.

Si se presenta, como dijo el Presidente de la Mesa, una moción suspensiva, en los mismos términos la discutiremos y ahí sí habrá mayoría quien avale o no su propuesta. Pero lo digo con todo respeto: no es procedente.

Nosotros no somos superior jerárquico de la Cámara de Diputados, aún en vías de información.

Nuestras fuentes del derecho parlamentario se nutren con la Constitución, la Ley Orgánica, el Reglamento y la costumbre, los usos y las prácticas parlamentarias.

No hay precedente, senadora, no hay precedente, en la historia del derecho parlamentario, de acudir a una vía de información como la que ahora usted pretende, y aun estando de acuerdo con su planteamiento, no puedo estar de acuerdo con el procedimiento que se plantea.

Presidente: Muchas gracias. Y gracias a todos por su atención.