Inédita crisis de violencia en Ecuador
El 9 de enero pasado, un grupo de personas con el rostro cubierto interrumpió de manera violenta una transmisión en vivo de la televisora TC de Guayaquil, Ecuador. Entonces, los encapuchados se llevaron a la fuerza a algunos trabajadores del canal. Horas después, las autoridades rescataron a los rehenes y detuvieron a varios de los asaltantes. A la par, hubo motines y secuestros de agentes en varias cárceles. También se registraron explosiones y atentados en diversas ciudades, como la propia Guayaquil y Quito.[1]
El lamentable saldo es de por lo menos diez personas muertas, y más de cien policías y personal penitenciario capturados por presos.[2]
De manera paralela, ocurrieron fugas de jefes de grupos armados y otros reos. José Adolfo Macías Salazar (alias “Fito”), al frente de Los Choneros, se escapó de la cárcel de Guayaquil, y Fabricio Colón Pico, líder de Los Lobos, salió de la de Riobamba. Se informó que estaba programada la transferencia de “Fito” a un penal de máxima seguridad,[3] entonces probablemente este asunto detonó su escape. El grupo de Los Lobos se dedica a actividades de narcotráfico y también a la minería ilegal, la comercialización de vacunas falsas y la trata de personas.[4] Los Choneros, por otra parte, son una pandilla que se relaciona básicamente con el tráfico de drogas.[5]
Respuesta del Gobierno
El 9 de enero, el presidente Daniel Noboa declaró la existencia de un conflicto armado interno y ordenó a las fuerzas armadas “neutralizar” a 22 grupos, a los que calificó como “organizaciones terroristas”. Asimismo, reunió al Consejo de Seguridad Pública y del Estado (COSEPE), para analizar la situación y definir los pasos por venir; además, el Ministerio de Educación suspendió las clases presenciales hasta el 12 de enero. Antes, el día 8, el mandatario decretó el estado de excepción y toque de queda por sesenta días. Esta declaración permite a los militares patrullar las calles y tomar el control de las prisiones.[6]
El decreto 111, que identifica la existencia de un “conflicto armado interno”, da pie a la movilización e intervención de las fuerzas de seguridad para “garantizar la soberanía e integridad territorial contra el crimen organizado transnacional, organizaciones terroristas y los actores no estatales beligerantes”. Además, habilita a las Fuerzas Armadas para “ejecutar operaciones militares, bajo el derecho internacional humanitario y el respeto a los derechos humanos, para neutralizar a los grupos identificados”.[7]
Estas disposiciones generaron un debate entre juristas sobre si son adecuadas para resolver la crisis, y también cuestionamientos, que señalan que al calificar la situación como un “conflicto armado interno” se consideraría como actores no estatales beligerantes a organizaciones de naturaleza criminal y con esto obtendrían cierta legitimidad en sus acciones.[8]
📸 EFE/José Jácome
Anteriormente, en abril del año pasado, el Consejo de Seguridad del Estado definió a las bandas criminales como “terroristas”. Entonces el objetivo era que las Fuerzas Armadas y la Policía pudieran combatir a estos grupos sin la necesidad de imponer un estado de excepción o de emergencia. De hecho, el antecesor de Noboa, Guillermo Lasso, impuso varias veces el estado de excepción. Cuando dejó su mandato de manera anticipada en noviembre pasado, la situación de violencia en el país iba en plena escalada.[9]
Situación nacional
Hace diez años, Ecuador era uno de los países más seguros de América Latina. Entonces la tasa de homicidios era de cinco por cada 100,000 personas. Ahora se estima que la proporción es de 40 muertes violentas por 100,000 habitantes. Esta nación se ha convertido en una de las más violentas del mundo.[10]
Tal descomposición social empezó durante la pandemia de COVID-19, cuando las bandas armadas ganaron terreno para controlar Guayaquil, la ciudad más poblada y con un puerto clave para las rutas del tráfico de drogas. Asimismo, las cárceles se convirtieron en la base de operaciones para los grupos al margen de la ley. Analistas señalan que el punto de inflexión ocurrió en 2021, cuando sucedió una masacre en la penitenciaría del litoral.[11] Ecuador es sitio de almacenamiento, procesamiento y distribución de drogas.[12] Sus puertos, sobre todo Guayaquil, ya forman parte de las rutas para la exportación de cocaína hacia Europa y Estados Unidos.[13]
Especialistas señalan que un factor que facilitó la participación de Ecuador en el mercado internacional de drogas fue la desmovilización de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), cuando estas firmaron el acuerdo de paz con el Estado colombiano. Entonces las cadenas de distribución y producción de cocaína se descentralizaron y los grupos delincuenciales de la región fortalecieron sus operaciones con cárteles transnacionales.[14] La fundación InSight Crime agrega como otro elemento de la crisis la falta de preparación del Estado ecuatoriano para enfrentar al crimen organizado.[15]
Otro elemento detonador ocurrió en agosto pasado, con el asesinato de Fernando Villavicencio, candidato presidencial, quien en los días previos afirmó haber recibido amenazas de muerte de parte de Los Choneros, posiblemente debidas a sus señalamientos a los vínculos entre el crimen organizado y funcionarios del Gobierno.[16]
Otra línea de investigación se relaciona con su propuesta de asentar el control militar sobre los puertos.[17]
Según algunas opiniones expertas, el presidente Noboa todavía no ha presentado un plan de seguridad a largo plazo en esta coyuntura. Al iniciar su campaña, prometió luchar contra el crimen organizado, fortalecer la red de seguridad social e invertir en educación. Pero aun antes de la actual escalada de violencia ya se había pronunciado en favor de la militarización, más autoridad para las fuerzas armadas, nueva tecnología y armas para la Policía. Algunas personas funcionarias reconocen que la posible implementación de propuestas más duras —como construir prisiones de alta seguridad y trasladar allí a los líderes de las pandillas— puede haber alimentado esta ola de violencia y las fugas de las prisiones.[18] Asimismo, el 3 de enero, el mandatario anunció que próximamente organizaría un referéndum para votar sobre medidas de seguridad, incluidas sentencias más duras para convictos por asesinato y tráfico de armas, y para fortalecer el papel de la milicia.[19]
Las cárceles han sido foco de violencia. Ya en 2021, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos alertaba sobre una situación de corrupción en el sistema penal.[20] Según algunas investigaciones, asegurar los penales es vital para garantizar que los esfuerzos para combatir prácticas poco transparentes sean efectivos.[21]
En este mismo tenor, a mediados de diciembre pasado, la Fiscalía General ecuatoriana inició una operación contra la corrupción y el narcotráfico, e implementó redadas en distintos puntos del país. El operativo denominado Metástasis generó la detención de decenas de personas, entre las que se encontraban jueces, fiscales, policías, abogados y personas relacionadas con el crimen organizado.[22]
Reacciones internacionales
Además del de Estados Unidos, otros Gobiernos de países como México, Perú, Bolivia, Chile, Colombia, Argentina, Venezuela, España y China, así como organizaciones y organismos internacionales y regionales, emitieron mensajes de condena, rechazo, preocupación, solidaridad y apoyo a Ecuador, incluso, algunos expresaron la posibilidad de enviar apoyo militar.
El secretario general de la ONU, António Guterres, manifestó sentirse “alarmado” por el deterioro de la situación de seguridad en Ecuador y condenó los “actos criminales de violencia”.[23] Los Gobiernos de Perú y Colombia ordenaron el despliegue de fuerzas policiales en sus fronteras, para evitar que la inestabilidad se extienda.[24]
La colaboración con Estados Unidos pudiera alterar los equilibrios.[25] En septiembre pasado, Washington y Quito suscribieron un acuerdo contra las actividades marítimas transnacionales ilícitas. El instrumento habilita las operaciones combinadas entre la Armada de Ecuador y el Servicio de Guardacostas de Estados Unidos. En específico, esta cooperación se enfoca en interceptar y frustrar actos delictivos relacionados con el narcotráfico y el crimen organizado; el tráfico de migrantes, y la pesca ilegal, la no declarada y la no reglamentada.[26] Además, en octubre, se dio a conocer un acuerdo entre ambos países que permite la presencia de buques militares estadounidenses en aguas de la costa ecuatoriana —una ruta utilizada habitualmente por los cárteles de la droga colombianos para transportar cocaína—, con el objetivo de combatir a las organizaciones del narcotráfico. Asimismo, durante este período, destacó la colaboración de Estados Unidos con Ecuador tras el asesinato del candidato Fernando Villavicencio.[27]
En este momento de crisis, la comunidad internacional hace votos para que Ecuador encuentre una vía pacífica para resolver los conflictos. Está por verse si el enfoque que ha tomado es el pertinente para resolver la situación en el corto y largo plazo. Es la primera vez que se ven escenas de desafíos claros al Estado en las calles y en televisión abierta. En esta coyuntura, el aprendizaje de otros países, como México —que se ha enfocado recientemente en atender las causas raíz de la violencia y la inseguridad— puede ser informativo para definir los siguientes pasos. Será tentador, sin embargo, replicar políticas duras de seguridad, aunque en el mismo Ecuador la imposición del estado de excepción varias veces no evitó esta crisis.[28]
X y Facebook: @RicardoMonrealA
Fuentes:
[1] Francesco Manetto, “De las rutas del narco a la tentación de Bukele: claves de la crisis de violencia en Ecuador”. El País (09 de enero, 2024), sec. América, ed. América-México [En línea]: bit.ly/48P9HZ6 [Consulta: 10 de enero, 2024].
[2] Viola Traeder, “Ecuador: la mano dura no bastará contra el crimen organizado”. DW (10 de enero, 2024), ed. Español [En línea]: bit.ly/4aOYd9E [Consulta: 10 de enero, 2024].
[3] Annie Correal, Genevieve Glatsky et al., “Ecuador Plunges Into Crisis Amid Prison Riots and Gang Leader’s Disappearance”. The New York Times (09 de enero, 2024) [En línea]: nyti.ms/48uFoH6 [Consulta: 10 de enero, 2024].
[4] Infobae, “Quiénes son Los Lobos, una de las poderosas bandas criminales que controla el negocio del narcotráfico en Ecuador”. Infobae (09 de enero, 2024), sec. América Latina [En línea]: bit.ly/4aT606s [Consulta: 10 de enero, 2024].
[5] Sebastián Jiménez Valencia, “¿Quiénes son Los Choneros, la banda criminal de alias Fito?”. CNN en Español (10 de enero, 2024), sec. Ecuador [En línea]: cnn.it/3SdhGte [Consulta: 10 de enero, 2024].
[6] Infobae, “Daniel Noboa declaró el Estado de Excepción tras la fuga del líder del grupo criminal más grande de Ecuador”. Infobae (08 de enero, 2024), sec. América Latina [En línea]: bit.ly/41RM9jI [Consulta: 10 de enero, 2024].
[7]Ana María Cañizares, Abel Alvarado et al., “Qué está pasando en Ecuador tras los hechos de violencia que sacuden el país”. CNN en Español (10 de enero, 2024), sec. Ecuador [En línea]: cnn.it/4aQ8Zwo [Consulta: 10 de enero, 2024].
[8] V. Traeder, op. cit.
[9] Ana María Cañizares, “El Gobierno de Ecuador declara ‘terroristas’ a las organizaciones delictivas que operan en el país”. CNN en Español (27 de abril, 2023), sec. Ecuador [En línea]: cnn.it/47xEg4r [Consulta: 10 de enero, 2024].
[10] Inés Santaeulalia y Carolina Mella, “Ecuador en cinco claves, radiografía de un país en crisis”. El País (08 de octubre, 2023), sec. América, ed. América-México [En línea]: bit.ly/3HdNgkl [Consulta: 10 de enero, 2024].
[11] F. Manetto, op. cit.
[12] Redacción, “Asesinato de Fernando Villavicencio: cómo pasó Ecuador de ser país de tránsito a un centro de distribución de la droga en América Latina”. BBC News Mundo (11 de agosto, 2023), sec. Internacional [En línea]: bbc.in/3TVlf8D [Consulta: 10 de enero, 2024].
[13] Ivan Briscoe y Glaeldys González, “Ecuador’s Descent Into Chaos. Can an Election Salvage Latin America’s Most Violent Country?”. Foreign Affairs (04 de octubre, 2023) [En línea]: fam.ag/47qk704 [Consulta: 10 de enero, 2024].
[14] Redacción, “3 claves que explican el ‘conflicto armado interno’ declarado en Ecuador tras varias jornadas de violencia”. BBC News Mundo (10 de enero, 2024) [En línea]: bbc.in/48Fbxvs [Consulta: 10 de enero, 2024].
[15] Juan Diego Posada y Lara Loaiza, “Las 4 razones de la crisis de seguridad en Ecuador”. InSight Crime (10 de agosto, 2023), ed. Español [En línea]: bit.ly/3NYYqx0 [Consulta: 10 de enero, 2024].
[16]Jin Yu Young, “What to Know About the Chaos in Ecuador”. The New York Times (10 de enero, 2024) [En línea]: nyti.ms/4aLpry1 [Consulta: 10 de enero, 2024].
[17] Redacción, “3 claves que explican…”, op. cit.
[18] Anastasia Austin, “La explosiva guerra de Ecuador contra el crimen carece de estrategia de salida”. InSight Crime (09 de enero, 2024), ed. Español [En línea]: bit.ly/4aOUs46 [Consulta: 10 de enero, 2024].
[19] J. Yu Young, op. cit.
[20] Carolina Mella, “Las mafias ponen en jaque a Ecuador desde las cárceles”. El País (09 de enero, 2024), sec. América, ed. América-México [En línea]: bit.ly/4aUQHdh [Consulta: 10 de enero, 2024].
[21] J. Yu Young, op. cit.
[22] Redacción, “3 claves que explican…”, op. cit.
[23] Europa Press, “Guterres se muestra alarmado por la situación en Ecuador y condena los ‘actos criminales de violencia’”. Europa Press (10 de enero, 2024), sec. Internacional [En línea]: bit.ly/429PoDD [Consulta: 10 de enero, 2024].
[24] Marita Moloney y Patrick Jackson, “Ecuador declares war on armed gangs after TV station attacked on air”. BBC News (10 de enero, 2024), sec. Latin America [En línea]: bbc.in/41VuVlI [Consulta: 10 de enero, 2024].
[25] Infobae, “EEUU expresó su ‘extrema preocupación’ por la violencia en Ecuador y ofreció su apoyo al gobierno de Noboa”. Infobae (09 de enero, 2024), sec. Estados Unidos [En línea]: bit.ly/41RCdqs [Consulta: 10 de enero, 2024].
[26] Yalilé Loaiza, “Ecuador y Estados Unidos acordaron combatir las actividades marítimas ilícitas transnacionales”. Infobae (28 de septiembre, 2023), sec. América Latina [En línea]: bit.ly/3RVf4ip [Consulta: 10 de enero, 2024].
[27] Infobae, “Estados Unidos y Ecuador acordaron el envío de militares para combatir el narcotráfico”. Infobae (01 de octubre, 2023), sec. América Latina [En línea]: bit.ly/41VGf0Z [Consulta: 10 de enero, 2024].
[28] V. Traeder, op. cit.
